A lo largo de los años, las personas con discapacidad han sido excluidas de ámbitos fundamentales para su desarrollo, especialmente del campo laboral, debido a que enfrentan barreras de diversos tipos que, a grandes rasgos, se traducen en entornos discriminatorios (Fundación ANDI, 2019). En diferentes aspectos, varios grupos de la sociedad civil han trabajado para enfrentar estas barreras y luchar por los derechos de este grupo poblacional por medio de iniciativas que a menudo se desarrollan desde la invisibilidad (ONU, 2019).
Según la OMS, se calcula que 1300 millones de personas — es decir, 1 de cada 6 personas en todo el mundo — tienen una discapacidad importante.
En el área de empleabilidad, el mayor inconveniente ha sido el desconocimiento por parte del sector empresarial -y de la sociedad en general- de las capacidades, necesidades y potencialidades reales que tienen las personas con discapacidad. Esto se traduce en barreras de acceso al mercado laboral, menos oportunidades de generación de ingresos y la imposibilidad de incluirse como parte activa de la sociedad.
La ratificación en 2009 de la Convención sobre los derechos de las personas con discapacidad de Naciones Unidas estableció en Colombia la ruta para que las personas con discapacidad, las organizaciones de la sociedad civil, las entidades públicas y la sociedad en general avanzaran en la garantía y protección de los derechos de dicha población. Gracias a este acuerdo se logró romper con el imaginario de que una persona con discapacidad es una persona enferma.
Se estima que en países como Colombia, el desempleo de las personas con discapacidad representa una pérdida de producto interno bruto (PIB) de entre 5.35% y 6.97%.
En el contexto colombiano, en el censo del año 2018, el DANE midió el número de personas con discapacidad en el país. Esta cifra fue de 3.134.036, lo que equivale al 6,5% de la poblaci6n censada (48.258.494 personas). Sin embargo, la información sobre las características socioeconómicas de estas personas es relativamente limitada y, por lo tanto, no permite hacer un análisis que vaya más allá de contar cuantas personas con discapacidad hay en nuestro país.
Por esto, desde 2002 se viene haciendo constantemente el Registro de Localización y Caracterización de Personas con Discapacidad (RLCPD), el cual incluye más información sobre la caracterización socioeconómica de este grupo poblacional. El RLCPD registró a diciembre de 2019, un total de 1539.750 personas con discapacidad en Colombia. Esta muestra representa un poco menos de la mitad de la población proyectada del censo y aproximadamente el 3,2% de la población colombiana censada en 2018. Esta muestra es menor a la población registrada en el censo, puesto que depende de los reportes de personas con discapacidad que decidan registrarse.
La Fundación Best Buddies Colombia trabaja en red con instituciones y empresas aliadas para lograr una mayor inclusión social y laboral de las personas con discapacidad intelectual en nuestro país a través del programa de Inclusión Social y Voluntariado, y también el programa de Oportunidad Laboral con los que ha logrado avances significativos. Como Fundación y junto a nuestras instituciones aliadas sabe que la inclusión es una responsabilidad de todos, que debe ser distribuida entre el sector público, privado, la instituciones educativas y la sociedad en general.
Hacemos indiferente la diferencia mejorando la calidad de vida y las condiciones de trabajo de nuestros Amigos del Alma y aportando al crecimiento económico del país por medio del aprovechamiento de las habilidades y destrezas de las personas con discapacidad.
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